Ruta Cicera – Braña de Los Tejos – Cicera

Se trata de una bonita ruta en la que atravesaremos bellos bosques autóctonos del Cantábrico como castaños, robles, hayas, fresnos, acebos, abedules y por supuesto, tejos. El sendero se hace cada vez más bonito a medida que ascendemos y concluye en un lugar único, la Braña de los Tejos, quizá el único lugar de toda Europa en el que se reúnen tantos tejos en estado natural, muchos de ellos milenarios.

La ruta comienza en Cicera (900 metros) donde cogeremos la senda forestal de Cordancas que nos llevará a través de un camino de piedras que si el suelo está húmedo resulta resbaladizo.

En el primer tramo se pasará por la antigua Ermita de Santa Cilde, donde solo encontraremos restos de las paredes y la techumbre del ábside, no hay muchos datos sobre ella, ya que ni se conoce su origen ni su historia. Este tramo está rodeado de un bosque de avellanos que discurre junto al arroyo de Cicera.

Siguiendo por el sendero bien marcado y señalizado con carteles informativos llegaremos a Cordancas, dónde nos encontramos con un refugio rehabilitado y nos adentraremos en el Murón y un bello hayedo en la parte final de este tramo.

Este sendero fue usado para la ganadería, la fabricación del carbón vegetal en la zona y del que se pueden ver vestigios claros y para la minería de blenda, abandonándose a principios del siglo XX. Este trayecto comunicaba Cicera y Lebeña, ya que el Desfiladero de La Hermida no existía en aquel momento. En este último tramo nos adentraremos en bosques con abedules, tejos, acebos y en la parte superior ha habido avistamientos de urogallos, una especie autóctona en peligro de extinción.

La llegada a la Braña de los Tejos nos resulta realmente espectacular ya que a su alrededor podremos disfrutar de unas preciosas vistas a la montaña Cantábrica.